sábado, 27 de noviembre de 2010

DERECHA "CAPITALISMO"

El capitalismo es el sistema económico fundado en el capital como relación social básica
 de producción. En el capitalismo los individuos privados y las empresas, empleando
trabajadores asalariados, llevan a cabo la producción y el intercambio de bienes o de
servicios, con el propósito de producir y acumular ganancias u otro beneficio de interés
propio.
También se denomina capitalismo o sociedad capitalista a todo el orden social, político
y jurídico originado en la civilización occidental y basado en aquel sistema económico.
El orden capitalista se distingue de los anteriores por su movilidad social y por la
regulación formal de las relaciones sociales mediante el contrato libre.

Existen diferentes apreciaciones sobre la naturaleza del capitalismo según la perspectiva
social e ideológica desde la cual se lo analice.

Características
El capitalismo es concebido, al menos, de tres formas diferentes dependiendo del énfasis
en la consideración de ciertas características como determinantes o intrínsecas, desde
enfoques respectivamente políticos, culturales y sociales, sin que esto implique una
exclusión mutua de las diferentes definiciones .

En cada caso existe una referencia en el origen etimológico de la palabra capitalismo a
la idea de capital, y estas referencias son codependientes: quienes invierten, crean o
adquieren capital permanecen como legítimos propietarios (capitalistas) durante el proceso
de producción; la rentabilidad del capital invertido en un libre mercado de productos y
servicios es el eje central de la vida económica.

Estas definiciones serían:

El régimen económico en el cual la titularidad de los medios de producción es privada,
entendiéndose por esto su construcción sobre un régimen de bienes de capital industrial
y de tenencia y uso de la tierra basado en la propiedad privada.
La estructura económica en la cual los medios de producción operan principalmente en
función del beneficio y en la que los intereses directivos se racionalizan empresarialmente
en función de la inversión de capital y hacia la consecuente competencia por los mercados
de consumo y trabajo asalariado.
El orden económico en el cual predomina el capital sobre el trabajo como elemento de
producción y creación de riqueza, sea que dicho fenómeno se considere como causa o como
consecuencia del control sobre los medios de producción por parte de quienes poseen el
primer factor.
Salvo en su específica combinación ninguna de las siguientes características es exclusiva
del capitalismo: la motivación basada en el cálculo costo-beneficio dentro de una economía
de intercambio basada en el mercado, el énfasis legislativo en la protección de un tipo
específico de apropiación privada (en el caso del capitalismo particularmente lockeana),
o el predominio de las herramientas de producción en la determinación de las formas
socioeconómicas. Así, sólo el conjunto codependiente de tales características puede ser
considerado un sistema capitalista, organizativamente en torno a las relaciones sociales
que produce en determinados espacios, independientemente se vea de forma favorable o no,
sería:

El sistema económico en el cual las relaciones sociales de producción y el origen de la
cadena de mando –incluyendo la empresaria por delegación– se establece desde la titularidad
privada y exclusiva de los accionistas de una empresa en función de la participación en su
creación en tanto primeros propietarios del capital. La propiedad y el usufructo queda así
en manos de quienes adquirieron o crearon el capital volviendo interés su óptima utilización,
cuidado y acumulación, con independencia de que la aplicación productiva del capital se genere
mediante un trabajo colectivo y conjunto, material e inmaterial, por cada uno de los actores
de la misma empresa.
Para definir al capitalismo es necesario describir todos sus principios básicos, ya que si
bien existe un consenso sobre su definición, este es de un nivel muy básico y suelen
confundirse las características atribuidas al capitalismo (algunas suelen ser erróneas)
con el capitalismo como sistema.

Una de las interpretaciones más difundidas señala que en el capitalismo, como sistema
económico, predomina el capital sobre el trabajo como elemento de producción y creador
de riqueza. El control privado de los bienes de capital sobre otros factores económicos
tiene la característica de hacer posible negociar con las propiedades y sus intereses a
través de rentas, inversiones, etc. Eso crea el otro distintivo del capitalismo que es el
beneficio o ganancia como prioridad en la acción económica en función de la acumulación de
capital que por vía de apropiación lockeana puede separarse del trabajo asalariado.

En las democracias liberales se entiende muchas veces el capitalismo como un modelo
económico en el cual la distribución, la producción y los precios de los bienes y servicios
 son determinados en la mayoría de las veces por alguna forma de libre mercado. Ciertas
corrientes de pensamiento discuten si esta es la definición exacta de capitalismo o si
sólo se trataría de una de sus características.

Generalmente, el capitalismo se considera un sistema económico en el cual el dominio de
la propiedad privada sobre los medios de producción desempeña un papel fundamental.
Es importante comprender lo que se entiende por propiedad privada en el capitalismo
ya que existen múltiples opiniones, a pesar de que este es uno de los principios
básicos del capitalismo: otorga influencia social a quienes detentan la propiedad de
los medios de producción (o en este caso el capital), la burguesía, dando lugar a una
relación jerárquica de funciones entre el empleador y el empleado. Esto crea a su vez
una sociedad de clases móviles en relación con el éxito o fracaso económico en el mercado
 de consumo, lo que influye en el resto de la estructura social según la variable de capital
 acumulada; por tal razón en el capitalismo la pertenencia a una clase social es movible y
 no estática.

Sobre la propiedad privada, el capitalismo establece que los recursos invertidos por
los prestadores de capital para la producción social, deben estar en manos de las empresas
 y personas particulares que los adquieran. De esta forma a los particulares se les
facilita el uso, empleo y control de los recursos que utilicen en sus labores productivas,
de los que, a fines empresariales, podrán usar como mejor les parezca.

La libertad de empresa propone que todas las empresas sean libres de conseguir recursos
económicos y transformarlos en una nueva mercancía o servicio que será ofrecido en el
mercado que éstas dispongan.
A su vez, son libres de escoger el negocio que deseen desarrollar y el momento para
entrar o salir de éste. La libertad de elección se aplica a las empresas, los
trabajadores y los consumidores, pues la empresa puede manejar sus recursos como crea
conveniente, los trabajadores
 pueden realizar un trabajo cualquiera que esté dentro de sus capacidades y los consumidores son
libres de escoger lo que desean consumir, buscando que el producto escogido cumpla con sus
necesidades y se encuentre dentro de los límites de su ingreso.

Competencia se refiere a la existencia de un gran número de empresas o personas que ofrecen y venden
 un producto (son oferentes) en un mercado determinado. En dicho mercado también existe un gran
número de personas o empresas, denominadas consumidores (también llamados demandantes), las cuales,
según sus preferencias y necesidades, compran o demandan esos productos o mercancías. A través de
la competencia se establece una «rivalidad» o antagonismo entre productores. Los productores buscan
acaparar la mayor cantidad de consumidores/compradores para sí. Para conseguir esto, utilizan estrategias
 de reducción de precios, mejoramiento de la calidad, etc.

El capitalismo se basa ideológicamente en una economía en la cual el mercado predomina, esto usualmente
se da, aunque existen importantes excepciones además de las polémicas sobre qué debe ser denominado
libre mercado o libre empresa. En éste se llevan a cabo las transacciones económicas entre personas,
 empresas y organizaciones que ofrecen productos y las que los demandan. El mercado, por medio de las
leyes de la oferta y la demanda, regula los precios según los cuales se intercambian las mercancías
(bienes y servicios), permite la asignación de recursos y la distribución de la riqueza entre los
individuos.

Cada uno de los actores del mercado actúa según su propio interés; por ejemplo, el capitalista,
quien posee los recursos y el capital, busca la maximización del beneficio propio por medio de la
acumulación y reproducción de los recursos, del capital; los trabajadores, quienes trabajan por la
recompensa material que reciben (el salario) y, por último, los consumidores, quienes buscan obtener
la mayor satisfacción o utilidad adquiriendo lo que quieren y necesitan al menor precio posible.

La doctrina política que históricamente ha encabezado la defensa e implantación de este sistema económico
y político ha sido el liberalismo económico y clásico del cual se considera sus padres fundadores a John
Locke, Juan de Mariana y Adam Smith. El pensamiento liberal clásico sostiene en economía que la
intervención del gobierno debe reducirse a su mínima expresión. Sólo debe encargarse del ordenamiento
jurídico que garantice el respeto de la propiedad privada, la defensa de las llamadas libertades
negativas: los derechos civiles y políticos, el control de la seguridad interna y externa
(justicia y protección), y eventualmente la implantación de políticas para garantizar el
libre el funcionamiento de los mercados, ya que la presencia del Estado en la economía
perturbaría su funcionamiento. Sus representantes contemporáneos más prominentes son Ludwig
von Mises y Friedrich Hayek por parte de la llamada Escuela de Viena de economía; George Stigler y
Milton Friedman por parte de la llamada Escuela de Chicago, existiendo profundas diferencias
entre ambas.

Existen otras tendencias dentro del pensamiento económico que asignan al Estado funciones
diferentes. Por ejemplo los que adscriben a lo sostenido por John Maynard Keynes, según el cual
 el Estado puede intervenir para incrementar la demanda efectiva en época de crisis. También
se puede mencionar a los politólogos que dan al Estado y a otras instituciones un rol importante
 en controlar las deficiencias del mercado (una línea de pensamiento en este sentido es el
neoinstitucionalismo)



junior monroy 18443389 E.E.S.


fuente:http://es.wikipedia.org/wiki/Capitalismo

No hay comentarios:

Publicar un comentario